Postal # 3: La escritura como camino espiritual
A propósito del amor por los libros y la escritura: Julia Cameron
¡Hoy 23 de abril es el día Internacional del Libro! Así que quiero honrar el amor por los libros y la escritura compartiéndote en esta postal frases de un libro precioso que tengo desde hace poco: El camino de la escritura de Julia Cameron.
Te comparto unos extractos del capítulo uno que espero te inspiren a escribir (o continuar escribiendo), tanto como a mí.
LA ESCRITURA COMO CAMINO ESPIRITUAL
Aunque tendemos a concebir la escritura en términos laicos, en realidad es un camino espiritual. Es posible pedir orientación espiritual de una manera consciente con una sencilla plegaria: “Señor ocúpate de la calidad, y yo me encargaré de la cantidad”. (…) Al alejarme de la necesidad de mi ego de ser una escritora brillante, mi escritura adquirió mayor claridad.
Ya no aspiraba a impresionar y a ser brillante, sino honesta.
(…) Escribir páginas matutinas es como enviar un telegrama al universo. Damos nuestras coordenadas exactas: aquí y cómo estoy. El universo, en respuesta, intercede por nosotros. Aunque tal vez no lo denominemos así, entonamos una oración. En las páginas de cada día se halla implícita la súplica: “Te ruego que me ayudes”, y el universo responde.
Al escribir las páginas nos atrevemos a revelar nuestros sueños. El universo responde a esos sueños, concediéndonos, si no lo que deseamos, sí lo que necesitamos.
(…) Las páginas simbolizan nuestra disposición a hablar -y a escuchar- a Dios. Al escribir las páginas abrimos de par en par la puerta interior.
(…) Al especificar los anhelos sobre el papel, comienzan a hacerse realidad. (…) ¿Qué significa que las páginas funcionan? De lo que hablamos es de nada menos que de un despertar espiritual. Nuestra actitud y visión de la vida cambian por completo. El mundo que antes nos resultaba inhóspito se vuelve bondadoso.
Poco importa si las concebimos como un medio para comunicarnos con algo bondadoso, o si consideramos que las páginas en sí son ese algo.
Lo que importa es la práctica diaria: una forma de meditación además de una oración.
Las páginas matutinas son una calle de dos sentidos. “Enviamos” y luego “recibimos”. Nos vienen ideas, pensamientos, presentimientos, corazonadas… Se nos guía y conduce con prudencia por el buen camino.
(…) Estamos enviando al universo un telegrama que dice: “Esta es exactamente mi ubicación y esto es exactamente lo que siento. ¿Puedes ayudarme”? (…) A veces no es tan importante lo que se escribe sino el hecho de hacerlo.
(…) Todos los artistas experimentan la chispa divina. Cuando escribimos con humildad, abrazamos el flujo de ideas que normalmente nos son ajenas. Al escuchar el hilo de inspiración que conduce de una idea a otra, a menudo experimentamos un sentimiento de asombro. Es como si estuviéramos encajando las piezas de un puzzle celestial, y a medida que plasmamos cada pensamiento sobre el papel, comenzamos a distinguir la forma de lo que desea ser creado. Experimentar esa inspiración es básicamente una experiencia divina.
Las ideas divinas calan en los pensamientos. Nosotros las anotamos pero ellas nos elevan.
(…) Cuando escribo, encuentro que me guían. (…) En la era moderna no hablamos tan abiertamente de lo divino, y sin embargo, su inspiración continúa siendo una realidad cuando abrimos el corazón. Cuando pedimos al universo que nos guíe, este nos guía con prudencia por el buen camino.
¡Hasta la próxima postal!
Con corazón y valentía,
Sandri
es hermosooo! yo también ando leyéndolo. justo anoche pensaba "que bien me cae Julia Cameron" jajajaja saludos!